ACADEMIA DE 14 AGOSTO DE 2012

ACADEMIA DE  14 AGOSTO DE 2012
TURNO VESPERTINO

jueves, 5 de enero de 2012

RODRÍGUEZ ANA MÓNICA Y MATEOS-VEGA MÓNICA. EN 11 AÑOS, LA ZONA ARQUEOLÓGICA DE XCARET RECIBIÓ SÓLO 172 VISITANTES. PERIÓDICO JORNADA 05-01-2012

En 2011, casi 2 millones de turistas en parques de la Riviera Maya
En 11 años, la zona arqueológica de Xcaret recibió sólo 172 visitantes
El INAH cobra 42 pesos la entrada; empresarios venden en miles visitas de lujo
Dueños incumplen convenio de promoción del área
Foto
Una de las pirámides localizadas dentro del parque de diversionesFoto Mónica Mateos
Foto
Pirámide localizada dentro del parque de diversionesFoto Mónica Mateos
Ana Mónica Rodríguez y Mónica Mateos-Vega
Periódico La Jornada
Jueves 5 de enero de 2012, p. 3
A siete años de que concluya el convenio de colaboración entre la empresa privada Promotora Xcaret y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), la zona arqueológica que se encuentra en los terrenos del parque de diversiones ha recibido a sólo 172 visitantes en 11 años.
La cifra contrasta con los casi 2 de millones de turistas que en 2011 acudieron a las áreas recreativas que posee Promotora Xcaret en la Rivera Maya.
De acuerdo con datos proporcionadas por el Instituto Federal de Acceso a la Información y Proteción de Datos (Ifai) a La Jornada, las zonas arqueológicas de Yucatán y Quintana Roo son las más visitadas en el sureste del país, incluso en esta última entidad, el año pasado hubo un incremento de 15 por ciento en el flujo de personas.
En Quintana Roo se encuentran 12 sitios abiertos al público, de los cuales Tulum es el preferido por los visitantes. En 2010 llegaron 992 mil 964 personas. Le sigue Cobá, que registró ese mismo año 384 mil 836. Ambos lugares se encuentran a pocos kilómetros de Xcaret.
El 30 de mayo de 1994 el INAH, entonces bajo la dirección de Teresa Franco, firmó un convenio con la empresa privada Promotora Xcaret, con el fin de conservar y proteger los monumentos arqueológicos, localizados en un terreno donde se construiría el megaparque de diversiones.
Los empresarios se comprometieron entonces a colaborar en la difusión de la zona (cláusula primera), lo cual no ocurre.
No hay información
Dentro del parque no se proporciona información exacta del lugar donde se ubican los vestigios prehispánicos, por lo que millones de turistas se pierden de esa visita.
Dentro del complejo privado existen un par de pequeñas pirámides, las cuales se encuentran en el camino que los turistas deben recorrer hacia la playa, pero en los alrededores no existen cédulas informativas.
El INAH no recibe recursos por las visitas a esas estructuras ni contabiliza el número de asistentes.
En este sentido, la décima segunda cláusula del mencionado convenio especifica que Promotora Xcaret se compromete a no obstaculizar la entrada de todas aquellas personas cuyo fin sea el de visitar únicamente los monumentos arqueológicos, ubicados en el desarrollo turístico bajo su administración y que, en consecuencia, tendrán libre acceso a los mismos.
En 11 años –según cifras del Ifai–, sólo 172 personas han llegado a esos vestigios y pagaron el costo de entrada (42 pesos) al INAH, que el año pasado realizó trabajos de conservación en esa zona.
Si se le dieran al INAH los 42 pesos por cada una de las personas que ingresa a los parques de Promotora Xcaret, recibiría al año casi 80 millones de pesos.
El grupo Xcaret también administra el parque de diversiones Xel-Ha, cercano a la zona arqueológica del mismo nombre, la cual si bien no recibe multitudes sí mantiene un flujo de visitantes anuales superior a las 2 mil personas.
El costo de entrada conjunta a los parques privados Xcaret y Xel-Ha es de más de 2 mil pesos por persona. Un tour de lujo a Tulum y Xel-Ha se vende en hasta mil 700 pesos, operado por la misma empresa que administra los parques. El INAH cobra 57 pesos por la entrada a Tulum y Cobá, y 42 pesos a Xel-Ha.
Será en 2019 cuando concluya el convenio entre el INAH y los dueños del parque de diversiones más exitoso de la Riviera Maya. El documento especifica que ambas partes se reunirán para analizar los resultados de la colaboración, y si estos son satisfactorios podría haber una prórroga del convenio, el cual incluye un pago anual que los empresarios deben hacer al instituto (en 2007 era de alrededor de 2 millones de pesos).
Tulum, Cobá y San Gervasio
A Tulum y Cobá se suma San Gervasio, en Cozumel, entre los lugares más visitados por el turismo nacional e internacional en Quintana Roo, una de las cinco regiones mayas del país.
Dicha entidad cuenta también con mil 200 lugares con vestigios prehispánicos. En 2012 se tiene programada la inauguración de la zona de San Miguelito y del Museo Arqueológico de Quintana Roo, ambas en Cancún.
La riqueza histórica y cultural de esta entidad, así como la importancia de sus vestigios serán en este año un gran escaparate, que será difundido a escala internacional en el contexto del fin del ciclo calendárico maya, fechado para el próximo 21 de diciembre.
Adriana Velázquez Morlet, directora del Centro INAH de la entidad, explica que en los recientes años hemos tenido disponibilidad de recursos, los cuales han sido los más altos de nuestra historia; hablamos de casi150 por ciento más de lo que teníamos hace 10 años, de manera especial, destinado al rubro de mantenimiento y mejoramiento de los espacios abiertos al público y la infraestructura para la visita.
Para ello, el Programa de Empleo Temporal (con fondos de la Secretaría de Desarrollo Social y el INAH), de casi 8 millones de pesos anuales, no sólo ha permitido mantener los sitios prehispánicos quintanarroenses en buenas condiciones, sino que nos ha convertido en la principal fuente de empleo de más de 20 pequeñas comunidades del estado.
Por esta razón, subrayó, sitios como Tulum y Kohunlich son algunos de los mejor presentados y conservados en el país.
En Quintana Roo, explica Velázquez Morlet, se puede documentar toda la historia del área maya, porque es un estado en donde se hallan desde evidencias arqueológicas del pleistoceno hasta las últimas ocupaciones con la presencia española, las cuales no existen en Yucatán ni en Campeche, debido a la destrucción que hubo para edificar las ciudades coloniales.
Con respecto a la baja afluencia turística que padecen las zonas arqueológicas del norte del país (La Jornada 15/11/2011), la arqueóloga considera que se debe a varios factores, por tratarse de dinámicas distintas.
Nuevos referentes
“El sur-sureste de México –ejemplifica– históricamente ha tenido una vocación turística en la que el componente arqueológico siempre ha tenido un peso enorme. No debe perderse de vista que sitios como Chichén Itzá están abiertos desde los primeros años del siglo XX (Felipe Carrillo Puerto inauguró la carretera que permitía visitar la zona en 1922), en tanto que algunos sitios del norte de México, a pesar de que comenzaron a ser explorados décadas atrás, hasta hace pocos años han comenzado a formar parte de la oferta cultural de sus estados.
En otras zonas del país más identificadas por sus playas, como Huatulco, en Oaxaca, la apertura del sitio de Bocana del Río Copalita podría convertirse en un referente para el turismo de la región en un futuro cercano, al igual que Soledad de Maciel, muy cerca de Zihuatanejo, en Guerrero.
Finalmente, la titular del Centro INAH-QR puntualizó: Creo que en la medida en que los sitios del norte de México sean más conocidos por el público recibirán un mayor número de visitantes, en definitiva, se deben fortalecer las estrategias de difusión y de valor de esos sitios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario